martes, 6 de octubre de 2015

CONTROVERSIAS

En julio de 2015, la grabación de un video por las cámaras de seguridad de una tienda de donas de Lake Elsinore, California, circuló en la internet y captó a Grande, acompañada de un amigo suyo, lamiendo donas que estaban en el mostrador. El problema se agravó más cuando Grande dijo en el mismo video odiar a Estados Unidos y los estadounidenses, quejándose así de la actitud de los estadounidenses hacia la comida rápida.



 Días después, Grande escribió un extenso mensaje en su cuenta de Twitter, aclarando que no odia a los Estados Unidos, "me siento orgullosa de ser estadounidense y amo a mi país". Asimismo, se disculpó por lo sucedido y por su "pobre comportamiento" al lamer una dona. En su mensaje, lamentó no haberse expresado con las palabras correctas cuando dijo odiar Estados Unidos, y que la prensa y resto de personas hayan sacado fuera de contexto dicha frase, pues, Grande afirmó haberlo dicho en otro sentido relacionado a la alimentación y la obesidad, a su frustación frente al hecho que "Estados Unidos es uno de los países con mayor obesidad en los niños".


Poco después de su primera disculpa escrita, volvió a disculparse en una grabación de video, donde expresa una vez más su arrepentimiento de sus actos en la tienda de rosquillas, y que desea ser una buena influencia para sus seguidores. En la grabación, dijo sentirse decepcionada de sí misma, y que es "humana, cometí errores, y así voy a aprender, de ellos."


El incidente en la tienda generó una investigación por parte de la policía local, principalmente para averiguar si había existido alguna violación de las reglas sanitarias por parte del local al dejar la dona sobre el mostrador. Luego de quejarse por la actitud de Grande, Joe Marin, el dueño de la tienda, no presentó cargos en contra de la cantante.

Días después, pese a que la valoración de salubridad de la tienda decayó, la polémica tuvo una vertiente positiva para el negocio de Joe Marin, ya que en pocos días las ventas crecieron exponencialmente, y cientos de clientes nuevos se acercaron a su pastelería por el morbo y curiosidad de estar en el mismo lugar donde había ocurrido el incidente por la que pasó la artista.
 

Adicionalmente, los seguidores de Grande le mostraron su apoyo en las redes sociales, y crearon etiquetas, entre ellos #LickDonutsWithAri, y subieron a Instagram fotomontajes humorísticos donde lamen una dona.



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